Las cucurbitaceas comprenden unas 700 especies de plantas distribuidas fundamentalmente por los países cálidos, son plantas anuales y con un gran valor por sus frutos voluminiosos y comesitbles.
Son característicamente hierbas rastreras o trepadoras mediante zarcilos en los tallos (caulinares); muestran hojas alternas, en general simples, más o menos lobadas, camosas escabras; poseen cistolitos. Las flores son unisexuales, las masculinas con traza de gineceo, generalmente monoicas (Bryonia cretica excepcionalmente es dioica), regulares, gamopétalas, pentámeras, con perianto doble y estambres atípicos; filamento sigmoide rematado por una antera con única teca, estambres libres o soldados en 3 grupos: (2)+(2)+1. En las formas primitivas se muestran los pétalos libres, y el ovario ínfero; algunas presentan inflorecencias en cima. Los frutos son muy variables; casi siempre son bayas (Bryonia) o bayas modificadas (pepónides), pero a veces se presentan como cápsulas (Momordica), a veces en elaterio.